Calzando el pasado, presente y futuro de México.
Un amanecer convulso: 1910 y el nacimiento de nuestro legado
En plena Revolución Mexicana, mientras las locomotoras rugían y el carbón teñía los cielos de Hidalgo, Simón Meneses cosió la primera bota de seguridad en un taller de Mineral del Monte. Con un pequeño taller y no más de 5 empleados, Simón Meneses tenía como visión hacer el calzado industrial más resistente de México, visión que ha sido permeada a través de las generaciones y reforzada por su nieto, nacido en 1940, Horacio Meneses. Aquellas botas bajaron a vetas de plata, resistieron lodo, pólvora y jornadas interminables; 115 años después siguen protegiendo a la gente que mueve al país.
Resistir, reinventarse, avanzar
Duramax ha pisado cada crisis y ha salido más fuerte:
Moraleja: la resiliencia no es solo aguantar, es mejorar entre ruinas.
Hecho en México: una ventaja competitiva palpable
Elegir un par de botas de seguridad Duramax hoy significa:
- Economía local viva – cada par activa miles de empleos en todo México.
- Menor huella de carbono – evitamos 7,200 millas náuticas de flete marítimo por par ver sus importados.
- Cumplimiento ESG – producción trazable, pruebas NOM-113, responsabilidad
social y uso de energías renovables.
IA, automatización y el futuro del trabajo
Los algoritmos de inteligencia artificial ya trazan planos impecables y calculan
milimétricamente cada corte, pero todavía no ponen un ladrillo sobre otro, no moldean un zapato desde la horma, no sujetan la válvula que libera aluminio fundido ni alzan la cerca de una casa. Y, sobre todo, jamás fundarán el éxito de un país: ese logro pertenece a las personas que transforman ideas en materia. Proteger esos pies —los que realmente construyen— con calzado industrial que reduce accidentes y fatiga no es un gasto; es asegurar que la tecnología avance sin dejar atrás a su fuerza más valiosa, las personas.
Camina con nosotros
De un taller iluminado por velas a una planta con robots de precisión, Duramax lleva 115 años forjando confianza paso a paso.
“Mientras exista alguien dispuesto a ensuciarse las botas para construir un mejor
país, Duramax estará ahí, hecho en México, con orgullo para recordarle al mundo que
ningún programa puede reemplazar el valor de un paso firme y seguro.”
Escrito por: Diego Meneses.
